En los fríos antárticos de Punta Arenascrece una planta que, por su capacidad de sobrevivencia, pareceinmortal. Se trata de la Deschampsia antártica, laúnica gramínea que ha resistido intacta las extremas condiciones defrío, radiación UV y salinidad. "La planta vive durante el invierno sinluz y bajo la nieve. Hicimos un hoyo de cuatro metros, y a pesar deestar enterrada en la nieve, estaba verde", cuenta Manuel Gidekel,especialista en biotecnología de plantas e investigador de laExpedición Científica Antártica del Bicentenario 2010, que organiza elInstituto Antártico Chileno (Inach)y que comenzó su segunda etapa elpasado 5 de enero.
Esta característica de la Deschampsia llamó la atención de loscientíficos. Al investigarla, descubrieron que esta planta, que creceen forma de "champa o pastito", según el profesor Gidekel, tiene metabolitos, es decir, la maquinaria molecular necesaria para defenderse del estrés oxidativo que producen los rayos UV.
La región antártica es uno de los lugares del planeta donde la capa deozono se encuentra más dañada. Por eso, los metabolitos son fuertesagentes antioxidantes y, según Gidekel, podrían ser aplicados endermocosmética para crear películas fotoprotectoras naturales e, incluso, desplegarse como un incipiente tratamiento contra el cáncer.
De hecho, la empresa biotecnológica VitroGen S.A. se propusodesarrollar la tecnología de cultivo celular de Deschampsia enbiorreactores. De esta forma, es posible obtener las sustanciasfotoprotectores sin necesidad de extraer la materia prima, ya que,según tratados internacionales, está prohibido explotar los recursosantárticos.
EXPEDICION
En esta segunda etapa de la Expedición Científica Antártica sellevarán a cabo 15 proyectos en terreno. La tercera fase y final sedesarrollará entre febrero y marzo de 2010 y contempla el trabajocientífico de 20 investigadores en seis proyectos, cinco de ellosfinanciados por Fondecyt, lo que representa el doble de las iniciativasapoyadas el año pasado. Las investigaciones se desarrollarán en elGlaciar Collins, en la Isla Rey Jorge, Shetland del Sur. Esta es unazona considerada como sensor natural de los efectos del calentamientoglobal. El glaciar ha registrado importantes señales de derretimiento,retrocediendo de seis a siete metros cada año.
FUENTE: http://www.latercera.com/contenido/659_216397_9.shtml