AUSTRALIA, Diciembre 14 (EFE).- Kerry Knowles,biólogo de la División Australiana de la Antártida (AAD) en Hobart,afirmó que "hace doce años que trabajamos con los pingüinos de laAntártida y nunca habíamos visto nada similar", y añadió que esperanrecibir cuanto antes muestras de tejido de los animales para determinarqué provocó su muerte."En alguna ocasiónencontramos a un pingüino muerto, lo que suele ocurrir una o dos vecescada año, pero jamás habíamos encontrado un número tan alto", indicóKnowles.
El biólogo añadió que "tenemos unconocimiento muy limitado del comportamiento de los pingüinos salvajescuando están enfermos, sabemos que se dirigen siempre hacia el mar, porlo que pensamos que las víctimas de esta enfermedad pueden haber sidomuchas más".
Las muestras de los pingüinos muertosllegarán a manos de Knowles a mediados de enero, "y hasta entoncesseguiremos con la duda de qué ha causado su muerte", explicó elprofesor.